A sus veintitrés años, Juan Pablo Piñeiro escribía como parte de su tesis una novela que, sin esperarlo, se convertiría en uno de los libros más vendidos y leídos de la literatura boliviana. Veinte años después, Cuando Sara Chura despierte tiene una nueva edición de la mano de la Editorial El Cuervo y está en la lista de las 200 obras a publicarse por la Biblioteca del Bicentenario.
Publicada por primera vez un 2 de diciembre de 2003, Cuando Sara Chura despierte fue la novela más demandada en Amazon entre los años 2010 y 2015. También es una constante en diferentes instituciones educativas que la incluyen en su plan de lecturas.
Para su creador, Sara Chura “es un personaje femenino potente, que tiene una fuerza especial”. Aunque no encuentre el motivo exacto del éxito de la obra, sabe que es esa “fuerza especial” por la que sigue vigente hoy. Y es que, si bien al escribirla no tenía más pretensión que hacer un libro “con todo el cuidado y respeto debido”, la reciente publicación de Cuando Sara Chura despierte es, de momento, la última de una decena de predecesoras. Entre ellas se encuentran una edición argentina y otra francesa.
A continuación, la entrevista realizada al escritor paceño Juan Pablo Piñeiro para Verdad con Tinta.
Jorge Mustaffá (JM): Es difícil resumir un libro, pero ¿podrías contarnos de qué se trata esencialmente Cuando Sara Chura despierte?
Juan Pablo Piñeiro (JPP): Es la entrada del Gran Poder y todo lo que gira alrededor. De alguna manera, es cómo se inaugura un mundo, se abren muchas posibilidades a partir de ese momento. Y, obviamente, la construcción y presencia de este personaje femenino superpotente que está relacionado con la tierra, la cultura y las transformaciones, pero sobre todo es esta mujer que se llama Sara Chura y que tiene que despertar.
JM: ¿A qué crees que se debe el éxito de la novela?
JPP: A que tiene una fuerza especial. Creo que la propia Sara Chura de alguna manera siempre la ha tenido, y, siempre lo he dicho, este primer libro es un regalo que ha venido en un tiempo cuando se configuraron muchas cosas, relaciones y momentos. Entre esos, la presencia que tenía Jesús Urzagasti, que ha sido mi maestro siempre. Creo que había una generación un poco mayor que yo que no estaba publicando mucho. Había algo de renovación en ciertas cosas que hicieron que la novela sea leída desde el primer momento y sea bien considerada. Son varios factores, desde técnicos y la escritura hasta espirituales y el contexto.
«Me di cuenta de que el libro tenía su propio camino independiente de mí».
JM: Cuando escribiste libro, ¿esperabas que veinte años después siga siendo publicado?
JPP: No, para nada. Bueno, lo he escrito como un libro con todo el cuidado y respeto que tiene que haber. Es chistoso porque era mi tesis en la Carrera de Literatura, pero me olvidé de que era tesis y la hice como novela. Y obviamente no me imaginaba. Incluso un día antes, siempre se acuerda mi hermano, que yo estaba casi llorando, diciendo “esto no sirve de nada, he escrito cualquier sonsera”, pero después, desde el momento en que hicimos una challa, me di cuenta de que el libro tenía su propio camino independiente de mí. Nunca me imaginaba, porque tampoco estaba pensando en eso.
JM: ¿Cómo es que el libro tiene un camino independiente de ti?
JPP: Cualquier autor que le está entregando todo lo que tiene a un libro en el momento en que lo publica ya no le pertenece. El propio libro busca su camino. Al principio lo publiqué por mi cuenta e iba a las librerías a dejarlo, a promocionarlo. Me di cuenta de que era difícil saber lo que iba a pasar con el libro porque, como dije, el rato que se lo entrega al público uno dice “hasta aquí llegó mi luz” y ya corre por cuenta del libro encontrar a sus propios lectores. Siempre me ha sorprendido que este libro haya encontrado lectores en todas partes, en muchos departamentos, países y realidades.
JM: Ahora publicas con la Editorial El Cuervo, ¿cómo ves a las editoriales bolivianas?
JPP: Siempre he admirado mucho a las editoriales bolivianas porque siempre tienen que estar luchando contra tantas cosas. Siempre he tenido la suerte de estar con buenas editoriales, con Gente Común, luego con 3600 y ahora con El Cuervo en esta etapa. Me parece que es una gran editorial, que tiene mucho cuidado con los libros y los acabados.
«Siempre he admirado mucho a las editoriales bolivianas».
JM: Recientemente publicaste Insectario, algo distinto en tu obra, ¿cómo es que pasas a la poesía?
JPP: Siempre he querido, es mi aspiración hacer poesía. Ya había escrito, pero no publicado. Es un interés que tengo desde que he empezado con la literatura. Considero que es el género más alto al que se puede aspirar. Generalmente estoy leyendo más poesía que narrativa, porque considero que ahí está el trabajo más alquímico, más cuidado, preciso y más poderoso con el lenguaje.
JM: ¿Cuándo fue la última vez que leíste Cuando Sara Chura despierte?
JPP: Antes de publicarlo hace veinte años. Luego solo leí algunas partes o fragmentos. Cuando suelto un libro trato de no leerlo. En realidad, ningún libro que he publicado lo he vuelto a leer. Es como que de verdad siento que al entregarlo al público ya no me pertenece. Incluso no me gusta leer artículos o lecturas sobre mis libros. Me gusta dejarlo ahí y que quede como un misterio. No sé si lo vuelva a leer. Es como una relación de respeto. Después de estar en el horno alquímico poniendo todo lo que uno tiene, lo suelto, trato de no leerlo y que siga su camino.
«Estos últimos años han sido muy buenos para la literatura boliviana».
JM: ¿Ves renovado el interés por la literatura en los últimos años?
JPP: Es difícil responder a esa pregunta. Por un lado, citando el contexto mundial, obviamente que toda esta relación con los libros, con toda esta época de la web 2.0, 3.0, ha hecho que no se lea mucho y no se tenga una relación tan personal, íntima, hasta mágica con un libro. Pero a la vez, estos últimos años han sido muy buenos para la literatura boliviana con todas las potentes narradoras cruceñas. Veo que, a diferencia de cuando yo he empezado a escribir, hay mucha creación en la que cada uno está haciendo búsquedas muy interesantes y que están teniendo bastantes lectores en otras latitudes.
JM: ¿Hay alguna anécdota relacionada a Cuando Sara Chura despierte que destaques?
JPP: La novela tiene mucho que ver y siempre ha tenido que ver con el número cinco, que para mí era muy importante; por eso son cinco capítulos; veintitrés personajes, dos más tres; la escribía a las 23:23; y justamente ha tardado un poco en salir esta nueva edición y sale el veintitrés de mayo del 2023 —23-05-2023—. Entonces, siempre he pensado que hay algo con esa numerología. También destaco el trabajo e ilustraciones de Diana Val, es algo que diferencia a esta edición.