El freno a los nuevos contagios de coronavirus se refleja en los números que va actualizando en sus informes diarios el Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED), donde se ha reportado menos de veinte casos por día y dos fallecidos en menos de diez días.
Las cifras estadísticas de la COVID constatan con el reporte la unidad de cuidados intensivos (UCI) del hospital San Juan de Dios: no hay ningún internado por COVID, así informó el responsable del área, Nils Cazón Rodríguez.
El responsable de terapia intermedia del San Juan de Dios, Marcelo Garzón, confirma que, desde hace aproximadamente unos 30 días, las salas se fueron liberando, teniendo actualmente dos pacientes internados.
Para la responsable de epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Claudia Montenegro, “indudablemente” los casos de COVID han descendido.
Sin embargo, recomienda a los ciudadanos “no bajar la guardia” y mantener estas cifras para no saturar el sistema de salud.
Para la profesional, el cambio de tendencia en la evolución de nuevos contagios va a responder a la aplicación de las distintas medidas de bioseguridad que ponga en práctica cada persona.
“El comportamiento que va tener la COVID es totalmente basado en la responsabilidad que vayan a tener las personas, va a depender de cada uno de nosotros, si voy a tomar un transporte público y veo que no cumple con las medidas de bioseguridad, entonces no lo tomo”, ejemplificó Montenegro a Verdad con Tinta.
La profesional reiteró que para controlar el avance del virus SARS-CoV-2 “nos tenemos que apoyar entre nosotros” porque el virus todavía “no se irá”.
“Si continúa esa conducta este mes más vamos a ver resultados, pueden ser favorables en el descenso de la curva, pero también adversos y entrar a un ascenso, justamente por la conducta de la gente”, indica.
Dice que para concienciar a la población sobre la situación de la COVID, el Sedes está realizando diferentes campañas y actividades.
Sin embargo, la funcionaria de salud ve “dificultoso” descender aún más la curva de contagios; porque, considerando las fiestas de fin de año, es casi “imposible” bajar las cifras a cero.
Los funcionarios de salud son conscientes que en estas fechas llegarán visitantes de otros departamentos e incluso de otros países, y con ello se puedan dar nuevos contagios.
“Si hubiéramos estado en otra situación, probamente estaríamos hablando de salir lo más antes y entrar en un descenso, pero nos ha tocado una época muy complicada para bajar los casos”. Montenegro asegura que el aumento o descenso de casos por coronavirus, ya no depende del sistema de salud “sino del comportamiento de la gente”.
OMS
Similar recomendación hizo la directora técnica del Programa de Emergencias de Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Maria Van Kerkhove en su informe semanal.
«Incluso si el número de casos baja, todos los países deben permanecer alerta. Es algo que ya hemos dicho, pero hay que volver a enfatizar. No bajen la guardia», afirmó en una sesión informativa virtual, Van Kerkhove.
En el departamento, Tarija cerró noviembre con 438 casos confirmados con COVID, representando el 20,1% de total de los que se reportó en octubre que es de 2 183. Los fallecidos en el onceavo mes representan el 44, 7% del total de muertos que se reportó en octubre que es de 67 fallecidos.
¿Por qué disminuyeron los casos?
Para Montengro, la estigmatización provocó que muchos enfermos no hayan reportado la enfermedad de la COVID a tiempo por miedo a ser discriminados por la sociedad, ello repercutió en los contagios y en la complicación médica de los pacientes.
Esa estigmatización “se ha perdido” y los enfermos con COVID acuden a los centros de salud para recibir atención médica.
“Antes la COVID era lo peor, al enfermo lo botaban de la casa, lo botaban del trabajo”, recuerda Montenegro.
La profesional indica que los cuadros “complicados” siguen llegando al hospital, lo que ha cambiado es que la gente ahora va más rápido al médico.