(Verdadcontinta-mayo/2018) La magia de la Chiquitania boliviana no solo conquistó a los religiosos jesuitas, sino que se transmuta en los diseños de una Diabla que se lució en la pasarela más importante de la moda boliviana.
La marca tarijeña Diabla se presenta por quinta vez en el Bolivia Moda o BoMo, el evento más importante en esta área del país.
Julia Beatriz Navajas y Pamela Gallardo Moreno, son las dos jóvenes diseñadoras tarijeñas que lograron imponer su marca entre las más importantes del país. En esta oportunidad, se inspiraron en la magia de la Chiquitania boliviana con creativos diseños.
Cada presentación en el BoMo para ellas, es como la primera vez, donde se mezclan los nervios con esa sensación inexplicable que sube y baja como una mariposa por el estómago.
Ya conocen las bambalinas, el movimiento, las marcas, pero la sensación sigue siendo la misma de aquella primera vez en mayo de 2014.
Julia, una de las diseñadoras, llega el viernes 11 al aeropuerto Viru Viru de Santa Cruz; el BoMo ya empezó y está a contrarreloj.
Julia Navajas, junto a las modelos que lucen los diseños de otoño-invierno de Diabla en el Bomo 2018.
Falta un día para la presentación de Diabla. Ella todavía viste de deportivo, está cargada de maletas y especialmente de nervios, pero todo ese peso, tiene un soporte importante en cada presentación: su madre.
Verdad con Tinta tuvo la oportunidad de estar con una de estas dos talentosas diseñadoras tarijeñas previo al evento, conociendo de cerca todo el trabajo que conlleva hacer una presentación a la altura de las principales marcas de la moda nacional.
Los nervios previos reflejan la entrega de las jóvenes al momento de preparar cada diseño y el esfuerzo finalmente es reconocido.
“Son bellas”, dice brevemente Pablo Manzoni, organizador de BoMo, quien hace notar el aprecio que tiene tanto por sus diseños, pero especialmente por ellas.
No solo es el desfile en sí, entre las tribunas, se ve a simpáticas modelos caminar con los diseños de Diabla, que rápidamente llaman la atención, sin faltar aquellos que piden tomarse una fotografía con quienes los lucen.
Así, Diabla, con toda su picardía y originalidad, sigue dejando su huella en las altas pasarelas de la moda boliviana, esta vez, con un poco de magia chiquitana.
Sasha, la blogger de Pilchas y Pintas, luciendo un look de Diabla en la tercera noche del Bolivia Moda.
Periodista especializada en Investigación y magister en Dirección de Comunicación y Nuevas Tecnologías. Cubre medioambiente, startups, soluciones y derechos humanos.
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