Aunque los “likes” no garantizan votos, lo que sí pueden garantizar las redes sociales, es una mayor cercanía de las autoridades o candidatos con sus electores
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Mercedes Bluske y Jesús Vargas Villena
(Verdadcontinta-junio/2018) El uso de las redes sociales ya no solo se limita a fines propagandísticos, sino que abre sus puertas a un sinfín de posibilidades, entre las que destacan el diálogo y la gestión.
Debido a sus características de inmediatez y alcance, son consideradas herramientas eficientes para la fidelización del ciudadano, así como para el acercamiento entre el político y el elector, porque antes los políticos resultaban lejanos al resto de la sociedad. Casi inalcanzables. Pero ahora están a un solo ‘click’.
“Un candidato, al estar en redes sociales, está presente”, dice con convicción el director ejecutivo de la consultora We | investigación & Estrategia, Gonzalo Ávila Sánchez, aunque asegura que aún no se está explotando al máximo el potencial que tienen estas plataformas dentro de la política.
“Solo se busca generar activaciones, de mensajes”, agrega respecto al uso de las redes, “pero no una comunicación gubernamental o herramientas de gestión”, continúa, comparando con lo que sucede en otros países, en los que las redes son herramientas eficientes para canalizar las demandas de los ciudadanos.
El ciudadano sigue a sus políticos en las redes porque quiere satisfacer su necesidad de interactuar, así como de sentirse útil y determinante con respecto a un hecho político en concreto.
Para lograr ese diálogo, Ávila insiste en que el próximo paso debe ser el uso de las redes dentro de la gestión y la comunicación gubernamental, como ya lo hicieron otros países.
Respecto al uso de las redes en la política nacional y local, Ávila cree que uno de los principales problemas es que “no se está escuchando al electorado”.
Hay una falta de diálogo en las redes sociales, porque los políticos se limitan a usarlas como una plataforma para transmitir información y nada más. “No se las usa como un medio de interacción”.
Otro de los errores más comunes, es que los políticos o candidatos suelen abrir páginas de Facebook y no las asumen con la responsabilidad que amerita, permaneciendo constantemente desactualizadas, impidiendo, una vez más, la posibilidad de diálogo con los ciudadanos.
El Dato
Durante sus años como asesor en la Cámara de Diputados de Paraguay, Gonzalo participó en el diseño, legislación y posterior aprobación del primer Sistema Nacional de Inteligencia de Paraguay (SINAI). Como consultor político, desarrolló estudios, estrategias y campañas políticas a nivel municipal, regional y nacional en Paraguay y Argentina, en la provincia de Misiones. Recientemente becado por la Universidad de Georgetown en Washington D.C con el Programa de Liderazgo y Competitividad Global. Actualmente radica en Bolivia.
El contenido y la estética, son aspectos que se deben tener en cuenta, al igual que la actualización constante del sitio, lo cual es un reto.
“Es un canal de comunicación que necesita tiempo y tienes que trabajarlo”, explicó el consultor político.
Sin embargo, para Ávila, el desafío que afrontan las redes en la política, es lograr una convergencia con los demás canales de comunicación que se utilizan, y hacerlo con coherencia, pues no son canales autónomos. Son parte de un todo.