Quién es Luis Almagro y porqué la oposición duda de la oferta de la OEA para auditar las elecciones en Bolivia

Luis Leonardo Almagro Lemes, de 56 años, es un abogado, diplomático y político uruguayo. Almagro fue embajador ante la República Popular China durante cinco años, tras ocupar diferentes puestos diplomáticos en la Cancillería de su país.

En 2010 fue designado canciller del gobierno de José Mujica Cordano, cargo que desempeñó hasta el 1 de marzo de 2015.  Pocos días después,  el 18 de marzo de 2018, fue elegido como secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), obteniendo el apoyo de 33 de los 34 miembros de la organización.

Al asumir la cabeza de la OEA, Almagro anunció que uno de los ejes principales de su gestión sería trabajar por “más derechos para más gente», acercando a la organización a la «nueva realidad del hemisferio».

Gran parte de su gestión se centró en la problemática político-social que vive Venezuela, siendo crítico a las posturas adoptadas en contra del Gobierno de Nicolás Maduro Moros, lo que le valió la expulsión del Frente Amplio, partido uruguayo de izquierda con el que surgió en la vida política de la mano de su mentor, José Mujica.

Sus posturas dieron un nuevo vuelco con su apoyo y justificación a la re postulación de Evo Morales Ayma, lo que le valió una serie de críticas y sembró cuestionamientos.

En septiembre de 2017, Almagro aseguraba a través de su cuenta de Twitter, que: «Evo Morales deberá respetar la decisión popular que dijo NO a reelección. Ningún juez puede levantar el dictamen del único soberano: el pueblo».

Pero al poco tiempo, en octubre del mismo año, su postura cambió drásticamente, favoreciendo al mandatario boliviano. Pese a que la Comisión de Venecia, en respuesta a una solicitud de la OEA, reportó que la reelección no era un derecho humano, Almagro aseguró que «el reporte no es una opinión política, es un documento con plena validez jurídica».

Posteriormente, en mayo de 2019, Almagro aseguró que  negarle la re postulación a Morales sería “discriminatorio”. De esta forma, Almagro desconoció los resultados del referéndum del 21 de febrero de 2017, mismo que había defendido de manera inicial en septiembre de 2017, alegando que se debía respetar la decisión popular.

Hoy, basados en esos hechos y declaraciones contradictorias del hombre a la cabeza de dicha institución, la oposición boliviana duda de las buenas intenciones de Almagro al ofrecerse para auditar el proceso electoral en el país. “No desconfiamos de la OEA como institución, desconfiamos de Almagro”, manifestaron los usuarios en las redes sociales.

Por su parte, el mandatario Evo Morales aseguró la mañana de este jueves que ganó en primera vuelta y pidió a la OEA que evalúe a la Misión de Observadores que llegó al país, ya que a su criterio, nadie pudo demostrar que hubo fraude.

Esta misión de observadores de la Organización de Estados Americanos emitió este miércoles un informe que sugiere que la mejor opción para resolver el conflicto que vive el país, es ir a una segunda vuelta aún si el presidente ganara por un ínfimo margen en la primera vuelta.

“No quiero pensar que la OEA ya está con golpe”, advirtió Morales en la conferencia de prensa de este jueves, pese a que su gobierno fue el que invitó a este organismo a realizar una auditoría al proceso electoral.