Minkedu es una propuesta educativa que nace en el Startup Weekend 2020, donde la temática giraba entorno a la pandemia y se proponía resolver diferentes problemáticas que habían surgido a raíz de la covid-19, tanto en el ámbito educativo como en la salud.
Janeth Mendoza y Andrés Quisbert se conocieron aquel fin de semana, decidiendo unir fuerzas para dar vida a un proyecto que busca cerrar las brechas de accesibilidad en un área primordial, pero que cuyos problemas ni el propio Estado ha sido capaz de resolver: la educación.
En tan solo un año, Minkedu no sólo ha logrado empoderar a padres y educadores del área rural y periurbana de Bolivia, sino que su plataforma ha llegado a diferentes países de la región y ha sido reconocida como una de las 125 innovaciones educativas y con impacto social de la región.Todo esto, en un año muy particular para el sistema educativo global, a causa de la pandemia.
“Incluso, antes de la pandemia vimos las dolencias que tenían educadores, estudiantes y padres de familia, para adaptarse al sistema educativo”, explica Janeth, quien asegura que aquello motivó al pequeño equipo a trabajar en una propuesta para empoderar a los educadores del aula y del hogar: maestros y padres.
Para Andrés, su experiencia en el campo de trabajo, especialmente en las áreas rurales y periurbana, fue un disparador importante a la hora de dar vida a Minkedu.
“Cuando yo empecé a hacer misión en áreas rurales, comencé a ver la brecha; los educadores estaban abandonados y manejaban material de hace bastante tiempo, haciendo que las experiencias de enseñanza no sean acordes a la necesidad del estudiante”, relata.
«Desde el trabajo del padre y del maestro, podemos lograr reducir la brecha de la accesibilidad»
Janeth Mendoza – Cofundadora de Minkedu
Además, los padres tampoco tenían herramientas para apoyar a los niños y jóvenes en su formación o no veían la educación como algo en lo que valía la pena invertir. Ante esta situación, la realidad estaba marcada por la deserción y abandono escolar, así como un bajo rendimiento.
Así, desde su plataforma, Minkedu trabaja en el acompañamiento y formación de padres y maestros, reduciendo la falta de accesibilidad en la educación, así como aportando al desarrollo de una educación de calidad en el país.
¿Cómo lo logra? Minkedu ofrece diferentes rutas de aprendizaje tanto para padres como para maestros, así, los primeros pueden formarse en áreas tan diversas como educación financiera, comunicación asertiva y tecnología y educación en el hogar, entre otros, mientras que los segundos pueden tener acceso a formación en liderazgo aplicado a la educación, conceptos básicos de computación y web, pedagogía e innovación.
En el caso de su programa “Educación en Hogar”, los padres no sólo tienen la oportunidad de aprender estrategias y recursos que les permiten acompañar a sus hijos en su proceso de formación, sino que también tienen acceso a educación financiera, fortalecimiento de la economía del hogar y desarrollo personal.
«A través de esta formación, las familias empiezan a llevar un sistema de inversión para la educación”, explican Andrés y Janeth, quienes considera que de esta manera pueden abordar el problema del acceso a la educación desde la familia, logrando que ellas mismas inviertan en la educación de sus hijos, sin esperar que sea el Estado quien invierta en ellos. Esta lógica, desde su experiencia, ayuda a que el acceso a educación de los niños, sea más sostenible.
Según experiencias que tuvieron, diferentes padres trabajaban vendiendo pan u otros alimentos, pero realmente no sabían si ganaban dinero o perdían.
Gracias los cursos de Minkedu, Janeth explica que ahora no sólo tienen una economía más clara y organizada, sino que también pueden disponer de su ganancia para garantizar la educación de sus hijos, nuevamente, garantizando su sostenibilidad.
“Desde el trabajo del padre y del maestro, podemos lograr reducir la brecha de la accesibilidad. Esto se traduce en que haya un bajo nivel de deserción y un aumento en las posibilidades de que los niños terminen el colegio y puedan acceder a educación superior”, agrega.
En una año Minkedu ha alcanzado 2500 beneficiarios de diferentes núcleos educativos en áreas periurbanas, trabajando y haciendo seguimiento a las familias tanto como a los formadores.
Pero el impacto de su plataforma no se ha limitado al ámbito nacional, sino que su modelo de negocio ha logrado escalar a nivel internacional, con presencia en Colombia, El Salvador y Guatemala, demostrando el potencial de Bolivia a la hora de desarrollar tecnología para la educación.